Le dieron ganas de suicidarse, asi le contó a su mejor amiga.
No es la primera vez que se lo dice (Desde que se conocen , y de eso hace ya muchos años), lo ha dicho un montón de veces; pero esta vez, ella empezó a preocuparse fuera de lo normal; mas, lo disimuló muy bien delante de él. Hizo como las últimas veces : se quedó callada, mirando -como si no lo viera- y haciendo un belfo con uno de sus labios.
El siguió hablando, o mas bien rumiando sus desgracias y tristezas; se notaba lo harto que estaba de todo y de todos, hasta de ella misma. Le reprochó su frialdad que le ganaba a la de él, le dijo sin groserías ni mala educación que el ya no creía en ella, que sentía que su amistad estaba gastada y que ni el ni ella habían hecho nada para repararla, que incluso estaba seguro que no habían repuestos para cambiar los que mal en ellos estaban.
¡Bla, bla, bla, bla, bla, bla...............!
Esa noche el habló sin parar y de los dos , él , es el que menos habla, pero esa noche una nefaria inspiración lo tenía por su cuenta, sentía la necesidad de asesinar su rabia, degollar la ira, inventar la frase lapidaria que la muerte envidiaría; iba en busca del único resultado que se podía dar, lo nefasto sería real. Por eso a cada palabra le puso pausas en cada letra para que al hablar lento se entendieran mejor, y no por decirlas con buena dicción perdieran la pasión enlazadas en las frases.
Habló como caminan los elefantes : " Lentos, firmes, seguros y aplastantes " , concisos le agrego yo.
(
Cont.)
No se por que nace ese deseo de asesinarse, se necesita valor para quitarse la vida. Otros dicen que es cobardía, yo creo que es valor. Si todos le temen a la muerte...Quitarse la vida es valor. Miro una tragedia en puerta. Espero el final.
ResponderBorrarBesos.
Te informo que estaré fuera quizás todo el mes de diciembre y parte de enero. Siempre estaré atenta a vuestras publicaciones cuando tenga tiempo entraré a comentarles. Muchos besos mi querido Geme.
Un relato bien cocinado. Nunca entenderé a aquellos que deciden quitarse la vida. Supongo que eso deriva de algún tipo de enfermedad mental, como la depresión.
ResponderBorrarEncantado de verte por aquí, cada vez entro menos.
Mejor mata, que matarte!!!
ResponderBorrarPassofinno muy buen relato, porque eso espero, que sea un relato. :)
Abrazos.
Tuve un profesor que decía que quien se suicida es un valiente ante la muerte y un cobarde ante la vida, espero por la segunda parte en todo caso creo que cada quien tiene derecho de disponer su vida como le de en gana un beso tu infiel siempre fiel
ResponderBorrarQuien no ha pensado en suicidarse alguna vez? Pero queremos ser cobardes y que nos recuerden como tal?
ResponderBorrarAbrazos.
Hola, entré a tu blog por un contacto, me pareció muy bueno, no quería salir sin decírtelo. Voy a seguirte. Aprovecho la oportunidad para invitarte al mío que es de literatura.
ResponderBorrarUn abrazo desde Argentina.
Humberto.
www.humbertodib.blogspot.com
Vengo a agradecerte los hermosos comentarios que dejaste en mis blogs. Llego llena de emoción y de esperanza. Cuando la generosidad de una persona es tan gigantesca como para elevar su pluma al máximo nivel y regalar el obsequio más preciado a quien escribe, como es ser su espectador y darle aliciente, ese SER (así con mayúsculas) es decididamente admirable. Dejas perfumado el aire cada vez que pasas por las letras, no sólo en tus entradas, si no por dónde vayas. Tus cálidas frases son contenido y continente. Me descubro ante vos. Eres admirable, ¡yo te admiro!
ResponderBorrarTe deseo la mayor de las felicidades y un éxito inconmensurable.
Un abrazo gigante desde Ciudad de Buenos Aires