Algunas veces, divagan como fantasmas por sus versos antes de convertirse -después del último suspiro- en una rosa, en un sueño que baila o en un duende que enamora.
La naturaleza les dio ese poder porque están hechos con los primeros polvos del Big-bang, esa primera explosión fue el hálito divino que los lanzó a la eternidad.
Los poetas no mueren, parecen que estuvieran muertos cuando agonizan, pero no es así; es sólo que están cambiando de piel, se regeneran al instante como las colas de las lagartijas, las estrellas de mar, los tentáculos de los pulpos, el axolotl Cortaziano para camuflarse entre los vivos.
¿Por qué lo hacen? ¿Por qué transformarse, regenerar y camuflarse?
¡Pues pa´que no los jodan más!
Les llegó la hora de hacer lo que siempre quisieron y aprovechan -con la tal muerte- la oportunidad.
Es un pacto secreto genético entre la parca y ellos: Ellos fingen que mueren y convencen a el todo mundo para no poner en ridículo a la muerte, y la muerte se vuelve su cómplice, para que ellos hagan por siempre ¡lo que les dé la gana! ¡hasta invisibles pueden ser si así lo quieren!
Tienen derecho a entrar a todas partes, sin pedir permisos y a cualquier hora como lo hacen sus versos, No-cover y en V.I.P.
¡Los poetas no mueren! mucho menos este, llamado MARIO BENEDETTI.
...En una rosa, en un sueño que baila... LOS POETAS NO MUEREN.
ResponderBorrar¡Qué hermosas palabras! Me inclino ante tu imaginería. Hacía tiempo que no leía algo tan especial.
Si Benedetti te hubiera conocido, de seguro que te hace sucesor de sus obras, de sus versos y de todo!! porque eres el mejor de los poetas.
ResponderBorrarBesitos de bambi.
Anónimo ....me sonrojas , escondes mis palabras .
ResponderBorraredmicara : Mi Amiguis , mi Bambi tu también colaboras a que me sonrojes , eres muy generosa .